Los Arhuacos hacemos pagamento para mantener el Equilibrio entre el Hombre y la Naturaleza.
En 2020 los Arhuacos tenemos 43.037 habitantes.
Como sabemos, los humanos tenemos que cuidar nuestro cuerpo para poder vivir, para conservar la vida.
De la misma forma tenemos que cuidar el territorio y la naturaleza, con la diferencia que allí se conservan más vidas. Y si ha ocurrido daño tenemos que sanarlo.
A través de miles de años como indígenas Arhuacos llegamos a entender (y constatar) que nuestro Cuerpo mantiene un vínculo gigantesco con el Territorio como una especie de “Conexión Inalámbrica”.
Lo que ocurre como daño en un territorio afecta directamente al Cuerpo Humano aun cuando se encuentra en otra latitud. No es algo que queremos pero así ocurre.
El pagamento es por lo tanto, como lo recalcan los mamüs: un mecanismo para ponernos de acuerdo con nuestro entorno, la naturaleza, el más allá (mundo espiritual) y el Universo.
No estamos diciendo que todo el mundo debe hacer pagamento a estilo Arhuaco para poder existir.
Lo que estamos diciendo es que algunas sociedades, que conforman la mayoría de la población mundial, tienen que cambiar la relación consumista y extractivista que han desarrollado con la Naturaleza y el territorio.
Con esto no estamos en CONTRA DEL DESARROLLO.
Como indígenas Arhuacos sabemos que solo un cuerpo enfermo produce ideas y métodos enfermos que llevan a la destrucción de las relaciones y la vida. Hay otro Desarrollo más evolucionado, invitamos a dar ese paso.
Nuestra visión como Inígenas Arhuacos respecto de la naturaleza es que todo lo que existe tiene un orden y una función establecidos desde la creación.
Todos los elementos poseen vida, espíritu y fuerza; toda la naturaleza tiene la misma esencia de la Madre Seynekün y guardan memoria de la creación y evolución. Hablan.
Los Arhuacos compartimos con el resto de la humanidad, nuestra inquietud por la conservación de la naturaleza como fuente de recursos para la sabiduría y la vida de las sociedades.
Asumimos esto como compromiso de manera diferente porque consideramos que los esfuerzos por la conservación implican necesariamente el esfuerzo por la construcción de una sociedad más responsable y conectada con el Planeta, sin que ello signifique limitar el bienestar humano.
Resaltamos la importancia de hacer uso prudente de la naturaleza para la subsistencia, que la calidad de vida y el bienestar humano se cualifiquen progresivamente en la medida que logremos establecer una relación armónica de beneficio mutuo con la Naturaleza.
Si bien es deber de los seres humanos procurarse bienestar, ello debe lograrse con el máximo sentido de responsabilidad dado el frágil sistema de vida de nuestro planeta ante los privilegios exclusivos de los hombres.
La superconexión que tenemos los humanos con el territorio y la naturaleza, que ocurre como una “conexión inalámbrica” es un hecho para nosotros, es algo que compartimos con muchas culturas del mundo.
Nuestro aporte al mundo es claro, no solamente como Indígenas Arhuacos sino, como un grupo humano responsable.
El hecho es que nuestro logro en relación con la naturaleza nos motiva a creer que es Posible Lograr el Desarrollo y conservar la Naturaleza. A esto te invitamos.
Es por ello que para los Arhuacos el territorio es la mayor escuela para la formaión y la sabiduría de la civilización.
Solo entendiendo ese orden natural seremos capaces de progresar como civilización. Al respecto no hay que inventar nada, todo está ahí.
Como Indígenas Arhuacos sabemos que en el universo, todas las cosas son semejantes a su origen. Tratar de imponer el orden meramente humano es luchar contra nuestro propio origen.
Como dicen nuestros mamüs, maltratar a la mujer es maltratar a las lagunas y cuerpos de aguas. Maltratar a los niños es maltratar las semillas, los ojos de agua; el estrés que nos producimos descongela las montañas...
Insistimos en que es un hecho para nosotros los 4 pueblos de la Sierra, que lo que le hacemos a la Tierra nos lo hacemos a nosotros, y lo que nos hacemos a nosotros se lo hacemos al territorio, a la naturaleza, al planeta.
Hemos reiterado que no nos referimos a la limitación del bienestar humano para conservar la naturaleza. Como indígenas Arhuacos estamos saguros que podemos ser un legado.
Compartimos con el resto de la sociedad nuestra misión por la Paz de las Culturas del Mundo y con la Madre Tierra.